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Se pueden cambiar las cosas...está en nosotros

Hay mensajes y mensajes. El que oí el día de Nochebuena del Rey me gustó. No es que sea yo especialmente monárquico ni me quiera meter en esos fregaos, que va a ser que no. Me gustó por el fondo. España es un gran país, con sus diferencias y sus problemas, como todos. Pero por aquí ha habido invasiones, guerras, crisis y siempre hemos pasado por ellas. Nuestros antepasados las vencieron y sin embargo nosotros estamos en estado de depresión…. Eso es lo que me gustó del mensaje. Nos anima a levantarnos. No sólo esto es cuestión de políticos o banqueros, ¡¡¡es cuestión de nosotros!!! ¿Quién es el que decide si se endeuda al 80% de su sueldo? ¿Quién es el que decide si se compra una viviendo por 10 veces más de lo que vale debido a un sistema corrupto e ineficiente? Somos nosotros. ¿Y qué hacemos? Estamos echando balones fuera. Mirando   a otro lado. Que si la culpa es de ZP o de Rajoy o de Botín o, etc. ¿Y nosotros qué?¿Cuántas veces la gente de mi generación salimos a la calle, pero

Las personas....

El mundo lo hacen personas. Es una buena noticia. Las personas se equivocan, es otra buena noticia, porque así aprenden y mejoran. Todos somos personas. A pesar de sociedades consumistas o sociedades con altos índices de pobreza, todos somos personas. Cuando dormimos somos iguales, cuando reimos somos iguales, cuando morimos somos iguales. ¿Por qué entonces somos tan distintos cuando vivimos? Las sociedades en que vivimos nos condicionan. Las modas, las etiquetas, los prejuicios. Todo nos condiciona. Pero hay una cosa que nos hace distintos. Da igual el entorno o las circunstancias. Es ser coherentes. Los personajes que más admiramos (para bien o para mal), lo son porque fueron coherentes consigo mismos. El ejemplo más común es Jesucristo pero desde Julio César a Kennedy ha habido cientos y cientos en todos los ámbitos. Y yo me pregunto, ¿por qué si eso es lo que admiramos nos cuesta tanto reconocer al que lo es y serlo nosotros mismos? Es más, ¿por qué permitimos que políti