25 años de nada
C uando uno ve a sus compañeros de cole después de 25 años es como ver a un familiar querido con el que hace tiempo que no tienes contacto. Es curioso pero los malos recuerdos desaparecen y los momentos dolorosos se convierten en divertidas anécdotas. Los años de vivencias comunes, alegrías, penas, etc, pueden con todo y sólo existen personas con un cariño especial unas a otras. Las emociones, sin saber muy bien por qué, afloran y se convierte en mágico. Así me siento yo hoy, 25 años después de ver a personas con las que compartí otros 7 años de mi vida. Personas que conocí cuando tenía más o menos la edad de mi hijo y perdí la pista cuando empecé con la Universidad. 25 años después uno entiende el por qué esas personas pasaron por su vida y por qué muchas de ellas serán para siempre. Como dice la canción, es bueno echar la vista atrás a veces, y comprender que lo que somos hoy es fruto de lo que fuimos ayer y de las barreras que vencimos. Si no hubiera pasado por donde pasé, no ...