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Mostrando entradas de 2022

El caos bonito

Dicen q no importan las veces que te caes sino las veces que te levantas . Si caes siete tienes que levantarte ocho. Y yo digo que una leche, claro que importan las veces que caes. La paciencia es finita y el degaste pesa. Las fuerzas flaquean. Y mucho. ¿Cuánt@s de vosotr@s habéis recibido tantos palos que habéis pensado, “que se levante su madre”? ¿Cómo lo lleva quien lucha contra una enfermedad durante años? ¿Y quién vive en la calle? Lo de la frase motivadora está bien, sobre todo si la dices desde la comodidad de tu día a día. Hay que luchar, sí. No hay que rendirse, también. Quizás a veces podemos ayudar “al otro” en vez de decirle citas maravillosas. Lo mismo necesita un empujón y no un sermón de autoayuda. Dicen que hay que quererse mucho y estar muy a gusto con un@ mism@ para poder dar felicidad a los demás . Y yo pregunto, ¿conocéis a alguien que de felicidad porque se quiera mucho así mism@? ¿Apostamos? La felicidad son momentos. El equilibrio es una actitud, no un estad

¿Qué es un equipo?

Voy a ser oportunista. La selección española de baloncesto ha ganado el Campeonato de Europa hace unas horas. Nadie apostaba por ella. No estaba entre los favoritos. Después de una generación excelente de Gasol y compañía, parecía que venían unos años de sequía, de “desenganche” del basket. Pero no, resulta que no hay nada imposible. Mira por dónde, una selección prácticamente renovada, con 7 jugadores “desconocidos”, nuevos en estas lides, que no sabíamos ni donde jugaban, decidió cambiar el guion y demostrar que tomaron muy buena nota de lo que hicieron sus mayores antes. Y, que irreverencia, decidieron competir para ganar. Sin una superestrella, pero con 12 supercurrantes y un jefe de obra magistral. A mi me gusta mucho el baloncesto. Estuve presente en alguna desgracia de mi equipo, el Barcelona, por allá por los 90. Y también en alguna alegría. Aquí todo empezó con aquellos Epi, Martin, Corbalán, Solozábal, Margall, Arcega…que decidieron que, en Californa, por allá por el 84,

En los tiempos del honor…

Empecé a hacer kárate con 8 años. Era un gimnasio de barrio, en Carabanchel, en una época complicada de la zona. Mi madre se empeñó en que tenía que aprender a defenderme y, como me molaban las pelis de kung-fú, pues ea, a dar puñetazos y patadas al dojo. Bueno, más bien a recibir. El caso es que me metió el gusanillo. A pesar de que un niño mayor, Valentín, cinturón azul en la época, me tenía frito (me cogía como sparring cada día), sobreviví a ese año en que los niños se cansan de recibir y lo dejan. Luego nos mudamos a Pozuelo y, previos pinitos en kung-fú (minchuán), allí descubrí a mi Maestro, @JoseLuisdeAntonio , grande donde los haya, como persona, como Maestro y como deportista. Cambié del kárate y kung-fú al Judo y Jiu Jitsu. En el fondo no hay diferencia. La hay en técnicas y manera de combatir, pero no en la esencia. Y es en eso en lo que me quiero detener. En la base de las artes marciales está algo que se ha olvidado en esta sociedad tan moderna y tecnológica. Es alg

Vuela alto, príncipe

Hay personas que llenan la escena. Solo con su presencia se ilumina la estancia. Lo hacen sin dar la nota, sin necesidad de aspavientos, sin gritar, simplemente estando, con sencillez, con naturalidad. Es un “carisma silencioso”. Algo que no se ve pero que tiene la intensidad del fuego. Mi tío José ha sido una de esas personas. A sus 95 años, él y su mujer, María, han sido los abuelos de tod@s en mi familia. Abuelos, padres postizos, padrinos, tíos…siempre disponibles para el que lo necesitara, siempre con la mano abierta, con la sonrisa en el alma y con una generosidad ilimitada, ofreciéndote todo lo que tenían. Así ha sido desde que tengo uso de razón. Y aderezado un ingrediente mágico, digno de un expediente X: un romance adolescente después de 70 años juntos. Se te encogía el corazón cuando veías cómo se miraban. Mi última vez, hace 15 días. Todos babeábamos con la demostración práctica de lo que significa esa palabra: AMOR. Sin duda, como el resto de su generación, un ejemplo en t

En qué la cagué con mi start-up

Una vez escuché que preguntaban a Rafa Nadal si aprendía mucho de las derrotas. Él, con su naturalidad habitual, contestó que aprendía más de las victorias. Tras las risas de la audiencia prosiguió, lo que pasa que uno suele perder más que ganar, entonces hay que procurar entender que salió mal y corregirlo para la siguiente. Más o menos es lo que nos pasa a los emprendedores. Vamos a perder más que ganar. La mayor parte de los intentos saldrán mal, pero nos irán entrenando para cuando llegue el momento bueno. Hay que saber gestionar éxitos y fracasos y seguir creyendo. A todo esto, ¿qué es un emprendedor? Bueno, según la RAE, emprender es acometer   y   comenzar   una   obra ,  un   negocio ,  un   empeño ,  especialmente   si     encierran   dificultad   o   peligro . Emprendedor es el/la que le echa un par para hacerlo. Hace algunos años le eché ese par. Me atreví con esa dificultado o peligro. Lo hice acompañado. José María, Raúl, Nacho y luego Kike decidieron vivir esa aven

Metavida (Metalife)

  (english version below) Corrían los 90 cuando se democratizó el uso de internet y cambió nuestras vidas. Yo lo descubrí en la sala de ordenadores de la Facultad de Económicas de la Complutense. Un amigo y un servidor nos conectamos a un chat y… ¡ligamos!, aparentemente con dos chicas de la Politécnica de Barcelona. Claro, esto, con 20 años, vaya chollo. A partir de ahí llegó la “adicción” al IRC (programa de chat del pleistoceno) durante ese año. Luego descubrimos que esto tenía muchas más utilidades. Y realmente abría un nuevo futuro ante nosotros. Era un cambio de era, un cambio de paradigma. Y desde entonces se ha galopado y ahora llega la evolución: el Metaverso y sus bondades. Lo escuchamos hasta en la sopa…pero ¿qué es?, o ¿qué se pretende que sea? Se supone que ya es, de manera muy inicial, la prolongación de nuestra vida física en el mundo digital. La idea es que existirá un mundo virtual pero no como el de ahora, otro, que está en construcción, al que entraremos a trav