Estoy muy cansado

Estoy muy cansado. Muy cansado de un mundo lleno de prejuicios y extremos. Del conmigo o contra mí. De los juicios morales. De la hipocresía. De l@s que dicen que hay que escuchar y dialogar, pero luego sólo vale su criterio.


Estoy muy cansado de quienes simulan vidas idílicas gracias a la tecnología e influencian a otros a hacer lo mismo. Cuando saben de sobra que las batallas son muy duras y los golpes también. Transmitimos una gran mentira a las generaciones jóvenes y luego la hostia es mayúscula. La vida no es una red social. Ni siquiera se le parece.

Estoy muy cansado de quienes siempre tienen razón. Del “y tú mas”, de l@s más list@s de la clase o l@s chispos@s a costa de los demás. La posesión de la verdad no la tiene nadie. Ríete conmigo, no de mí.

Estoy muy cansado de quienes se denominan tolerantes. Se pasan la vida dando consejos a los demás. Esos consejos “mágicos” que ell@s no se aplicarán jamás. Sólo miran su propio ombligo y son un@s cracks para descubrir la paja ajena.

Estoy muy cansado de quienes arrasan con su furia y lanzan estacas al corazón con sus palabras. No saben el daño que pueden hacer, sobre todo cuando les falta contexto.

Estoy muy cansado de quienes consideran débiles a l@s que no hacen lo mismo que ell@s. Cada uno tiene su historia, y es maravillosa. Con sus etapas y sus momentos. No menospreciéis a quien no sigue el mismo guión, os podéis llevar una gran sorpresa.

Estoy muy cansado de quienes reprochan una y otra vez. Los errores se superan o no. No pueden ser el comodín permanente para “ganar la batalla”. La perfección no existe. Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra.

Estoy muy cansado de tanto envoltorio y tan poca raíz de los problemas. Soy una persona de mi tiempo y comprendo lo que pasa a mi alrededor. Sólo veo soluciones cortoplacistas y parches. Cortinas de humo para distraer la atención. Pero el origen de lo que nos jode, eso no lo tocamos. Quizás porque no nos interesa.

Estoy muy cansado de quienes se creen más valientes que el resto. Quienes piensan que momentos puntuales les otorgan el poder de atribuirse ese adjetivo. Aquí tod@s tenemos miedos y todos hemos sido valientes, campeones. Cada un@ enfrenta sus demonios lo mejor que puede.

Estoy muy cansado de los falsos amigos. Un amigo de verdad es un hermano. No está cuando le viene bien, está siempre. Por eso son poc@s.

Estoy muy cansado del victimismo permanente. Todos tenemos altos y bajos. Pero ni tan bueno ni tan malo. Me joden mucho las “víctimas” que luego machacan al resto amparad@s en una supuesta debilidad. Aquí nadie es de piedra. Todos lloramos, sufrimos y reímos. Humildad sí. Victimismo no.

Estoy muy cansado de quienes llaman amor a modelar a sus parejas. A veces incluso con agresividad o violencia. A veces incluso a los hijos. El amor no es transformar al otro como me gustaría que fuera. Es dejarle ser él o ella y aún así estar dispuesto a darlo todo sin esperar nada.

L@s que me conocéis, sabéis que soy optimista. Que durante mucho tiempo me he implicado de pleno en mejorar, en la medida de mis posibilidades, la vida de los demás. Sabéis que creo que hay que intentarlo siempre y ser respetuoso con los tiempos de cada uno. Soy culo inquieto. No soy sospechoso de escribir esto rascándome la panza en un sillón.

Sin embargo estoy empezando a pensar que me equivoco en todo. Quizás es que nuestra naturaleza es esa. Y la bondad, el respeto, el amor son las excepciones a la envidia, la ira, la intolerancia…Supongo que moriré equivocado entonces. Soy muy mayor ya para cambiar de enfoque.

Y no, no estoy libre de pecado. Cometo todos ellos. Y tengo mucho que mejorar. O tal vez debería cometerlos más, no sé.

Me siento muy cansado del bombardeo de información permanente. Desconfianza, destruir versus construir. Me genera tristeza.

Sé que aún es válido el lema que aprendí por allá por los 90. <<Cambia tú para cambiar el mundo>>. En ello estoy, pasando de pantalla y conviviendo con las alegrías y las penas de hacerlo. Es lo que tiene estar vivo.

Confío todavía en ese mundo mejor. En los momentos oscuros es cuando sale lo mejor del ser humano. Y este es un momento oscuro.

 

#impossibleisnothing

 

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