S&P, Moody's y Fitch: los jueces del rating y de mucho más

La economía es muy simple. Durante la Historia se han generado múltiples modelos y ha habido grandísimos genios y teorías, para llegar siempre a lo mismo. Dos más dos son cuatro. Cualquier cambio de esa ecuación no es economía, es política, o lo que es peor, ingeniería financiera de un tercero
para sacar un beneficio.

Lo divertido de los economistas es que todos creen tener razón, y al mismo tiempo creen que los colegas que no piensan como ellos se equivocan. ¿Defecto intrínseco a la profesión? Tal vez... Esto no es importante, es incluso sano, salvo cuando te encuentras en una de las peores crisis económicas (y de más cosas) que ha conocido la Humanidad. Entonces, no saber por cuál camino sería mejor ir y tener a los expertos sin nuevas ideas, no es demasiado prometedor.

Después están los que ponen notas. Estos son los campeones de la hipocresía. Cuando todo va bien sobresaliente general, porque gran parte de sus intereses van con ello, ¿y cuando va mal? pues aprueban a quien les conviene, suspenden a los que ni les va ni les viene y dejan en "ni fú ni fa" a quién les conviene tener en constante tensión. ¿Y por qué? Pues porque en el primer caso también están en juego sus propios intereses, en el segundo no tienen ningún interés y en el tercero, según especulen con los que dejan en el medio, los primeros podrán darles más rentabilidad o no. Y encima esto mola, porque, no les tose nadie. Y para colmo la factura la pagan los propios estudiantes.

Voy a tratar de contarlo de una forma sencilla. Las agencias de rating son unas empresas privadas que se dedican a emitir informes sobre la capacidad de pago y de crédito de otras empresas, de instituciones y de gobiernos. Estos informes los hacen a su vez a petición de aquellos a los que van a calificar, y los cuales les pagan. ¿Les pagan? ¿Pero quién es el masoca que pide un informe, paga por el y después le colocan un suspenso que le cuesta sangre sudor y lágrimas remontar?

Pues tiene una explicación, la práctica del mercado "obliga" a que, todo aquel con un determinado caché, que vaya a emitir deuda o tenga intención de endeudarse, encargue un informe a un experto "independiente" para que le ponga nota a su capacidad de pago. Además unas notas que no son comunes en todo el mercado, sino que cada agencia tiene las suyas. No hay un método común.

Puede darse el caso que, a un "cliente" que les paga mucho y tenga buena nota, le viniera bien que otras empresas o Estados no tuvieran tan buen nota. Así, podría comprar más barato, y si depués la nota, casualmente subiera, pues podría vender más caro aquello que compró. Esto puede pasar con un banco, una gran empresa, un Estado... Imaginaros con un Estado poderoso, que sea capaz de prestar a otros muy caro, aún a sabiendas de que ese otro Estado sea solvente, pero claro, hizo mal el examen y le pusieron mala nota. O en muchos casos...ni siquiera hizo examen.

Hay más de 70 Agencias de rating, pero sólo tres son las superestrellas, Standard and Poors (S&P), Moody´s y Fitch. Es importante saber que estas agencias son de propietarios con intereses inversores, como Warren Buffet en el caso de Moody's o de empresas con múltiples intereses, como Mc Graw Hill en el caso de S&P. Además estas empresas realizan inversiones, aunque nunca se ha comprobado que exista un conflicto de intereses.

Vamos que lo de la independencia...

El Viernes 13 de Enero de 2012, cual caza de Templarios, como el fatídico día conocido, para empezar el año por la puerta grande,una de ellas, S&P se dedicó a repartir malas notas a todos los alumnos por "sorpresa". Esto significa que el lunes 16 y las semanas siguientes habrá tormenta en los mercados. El lunes, y aunque esto ya estaba descontado en gran parte, los mercados van a recibir un "shock de confianza". 

¿Es importante la confianza?. Sí, lo es. Es el motor de los mercados. La crisis actual, aparte de múltiples circunstancias, es sobre todo una crisis de confianza y de pensar constantemente que el vecino me va a dar la puñalada por la espalda. Si la actitud fuera otra, el ciclo económico cambiaría. Así de claro. Y cuando un irresponsable como S&P o sus amiguetes / colegas, se dedican a hacer lo que han hecho, la confianza se muere y así no podemos salir del pozo. 

Recordar lo que os decía al principio, los economistas están siempre en permanente debate. Un cuestionado Keyness consiguió convencer a unos Gobiernos para que aplicaran políticas que incentivaran la economía a través del propio gasto e inversión de los Estados. Y esto reflotó el mundo tras la segunda guerra mundial. Hoy, 60 años más tarde, esto no vale. Esas políticas no han funcionado, y hay que hacer otras, con otros enfoques, como pasó en los años 80 con las escuelas monetaristas. Pero ese debate en el que todo el mundo se convierte en el economista más listo, que no es malo, no se traslada a las agencias de rating, que también son economistas. Los poderosos no las interpelan...¿será que les beneficia?

Nadie se tiene que volver loco el lunes 16 ni las semanas siguientes. Oigo a grandes empresarios, irresponsables en algún caso, hablar de corralito o hablar de sacar la pasta fuera del país. NO. No les hagais caso, ni empecemos a hacer locuras.

Somos mucho más que una nota, por muy A,B o C que sea. Somos mucho, mucho, mucho pero que mucho más. Nuestro futuro no depende de unos señores que se hacen ricos a costa de repartir tortas al resto. Nuestro futuro, depende de nosotros. De nuestro trabajo, y a nivel colectivo de nuestra capacidad como país para olvidar victimismos, dejar de quejarnos y ponernos en pié. Hay que construir, no destruir.

Que nadie se me vuelva loco mañana, ni pasado, ni las siguientes semanas.

Pase lo que pase en los mercados saldremos de esta, no lo dudeis....

Comentarios

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  2. Pero que bien te expresas David, muy bien la explicación y el blog (hacía mucho tiempo que no tenía la oportunidad de leerte). Sinceramente creo que uno de los problemas que frenan la salida de la crisis (entre otros muchos) es el desconocimiento o falta de entendimiento de muchos temas, especialmente financieros y económicos (o el intentar hacer que las cosas son muy complicadas o difíciles para la mayoría de los mortales, cuando muchas de ellas, no lo son tanto).
    Yo quisiera sólo añadir una cosita en relación a estas agencias, y es simplemente remontarnos al año 2008 cuando las agencias de rating S&P, Fith y Moody’s calificaban a Islandia con la máxima nota: triple A. Recordemos Islandia en Octubre de ese año se declaró en bancarrota y se vio obligado a nacionalizar los tres bancos más importantes del país en cuestión de días.
    Cómo es posible que las agencias de rating metieran la pata tan al fondo? Y el problema es que los “mercados” siguen escuchando a día de hoy a estos señores (porque esas prácticas del mercado, como bien has comentado, se siguen aplicando … pues que cambien las reglas del juego, digo del mercado!). Este fue otro ejemplo más de la falta de conocimiento general y creencia en dichas agencias, si se supiera más del tema y dejasen de pensar que dichas agencias están formadas por expertos financieros, sino por especuladores, igual este tipo de cosas dejarían de pasar y el futuro de dichas agencias estaría próximo, o al menos la forma en la que llevan o realizan en la actualidad sus calificaciones.

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  3. Me gusta leerte mucho. Eres elocuente y disfruto con tu lenguaje llano y claro.

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