En términos económicos...por qué yo si creo en mi país
Los datos están ahí. Innegables, irrefutables, indiscutibles, interpretables, pero están ahí. 19,90% de paro, -7,47% de déficit público, 63,5% de deuda pública y un crecimiento del PIB inexistente. Si es por los datos la cosa pinta muy mal. Si le unimos la estimación del BCE de economía sumergida (15 mil millones de euros en el caso de España, parece algo mejor).
Si acudimos a la interpretación podemos decir que el PIB per cápita de casi 30 mil dólares es mucho más de lo que soñaron nuestros padres y no muy alejados de países como Italia o Gran Bretaña; o podremos decir también que en déficit y deuda estamos mejor que Francia (claro en deuda privada perdemos con todos), y que la estacionalidad nos concede los famosos brotes verdes de vez en cuando, y etc, etc e interpretar e interpretar.
También podría ser demagogo. Hablaros del corte inglés y centros comerciales similares en estas fechas Navideñas o en el lleno de miles de establecimientos hosteleros la noche de fin de año. Y ser mucho más y hablar de los desplazamientos y viajes y del gasto medio de un español en Navidad...Pero además de demagogo sería ingenuo.
España ¿qué tiene?. ¿Qué producimos?. Sol y servicios. No hay una industria potente ni un sector primario competitivo. Tenemos turismo y servicios relacionados con él. ¿Pero que más tenemos?: herramientas. Tenemos herramientas para hacer cambios. Se nos olvida que por aquí ya pasamos varias veces y salimos. Tasas del 22% de paro, PIB per cápita de 8 mil dólares, caídas del PIB del 3%. Esto ha pasado. ¿no?, preguntar a la generación que se jubila ahora.
¿Qué nos diferencia? La capacidad de generar tejido empresarial a corto plazo, de buscar oportunidades de negocio, de competir, de imaginar, de crear con apenas recursos. Eso tiene este país.
¿Cómo se sale?. Por supuesto siendo más competitivos. Reformas estructurales que han de empezar por la política educativa, pasando por la articulación del estado y cambiando el modelo productivo. Premiando la I+D+i y a los emprendedores. Cambiando el modelo de financiación, ¿por qué no se pueden financiar las pensiones con impuestos y tiene que ser necesariamente a través de la seguridad social?. Pero siendo nosotros mismos, dando estabilidad a los mercados a través de políticas expansivas coherentes, consistentes y uniformes en el tiempo. Y por supuesto, comunicándolas de una manera correcta, en tiempo y forma, sin sobresaltos, sin sorpresas. Reformas que llevarán tiempo en dar fruto, pero que sin duda lo darán.
Me encanta el anuncio de nike de Nadal, Gasol e Iniesta. Nuestro país tiene una luz especial, que algunos dicen que ya no brilla. La gente de aquí es de otra pasta, no se rinde jamás. Y sin embargo nos estamos rindiendo. Estamos tirando balones fuera, echando la culpa a otros y no asumiendo nuestra parte alícuota, muy pequeña, pero que la hay. Y por supuesto, volviendo a ser los mejores tertulianos del mundo...pero la palabra no crea, crean lo hechos.
Estoy convencido que como en un enfermo, el estado de ánimo cuenta, y lo principal de este enfermo es que el estado de ánimo sea positivo. Debemos ser optimistas y trabajar, sin lloriqueos. Esto da seguridad a los mercados y muestra solidez ante las tormentas. No podemos ser un barco de papel que sople a donde nos conduce el estornudo de Francia o Alemania. Tenemos la obligación, la historia y las condiciones para estar en el puesto de mando junto a los grandes capitanes.
Yo creo, ¿y tú?
Si acudimos a la interpretación podemos decir que el PIB per cápita de casi 30 mil dólares es mucho más de lo que soñaron nuestros padres y no muy alejados de países como Italia o Gran Bretaña; o podremos decir también que en déficit y deuda estamos mejor que Francia (claro en deuda privada perdemos con todos), y que la estacionalidad nos concede los famosos brotes verdes de vez en cuando, y etc, etc e interpretar e interpretar.
También podría ser demagogo. Hablaros del corte inglés y centros comerciales similares en estas fechas Navideñas o en el lleno de miles de establecimientos hosteleros la noche de fin de año. Y ser mucho más y hablar de los desplazamientos y viajes y del gasto medio de un español en Navidad...Pero además de demagogo sería ingenuo.
España ¿qué tiene?. ¿Qué producimos?. Sol y servicios. No hay una industria potente ni un sector primario competitivo. Tenemos turismo y servicios relacionados con él. ¿Pero que más tenemos?: herramientas. Tenemos herramientas para hacer cambios. Se nos olvida que por aquí ya pasamos varias veces y salimos. Tasas del 22% de paro, PIB per cápita de 8 mil dólares, caídas del PIB del 3%. Esto ha pasado. ¿no?, preguntar a la generación que se jubila ahora.
¿Qué nos diferencia? La capacidad de generar tejido empresarial a corto plazo, de buscar oportunidades de negocio, de competir, de imaginar, de crear con apenas recursos. Eso tiene este país.
¿Cómo se sale?. Por supuesto siendo más competitivos. Reformas estructurales que han de empezar por la política educativa, pasando por la articulación del estado y cambiando el modelo productivo. Premiando la I+D+i y a los emprendedores. Cambiando el modelo de financiación, ¿por qué no se pueden financiar las pensiones con impuestos y tiene que ser necesariamente a través de la seguridad social?. Pero siendo nosotros mismos, dando estabilidad a los mercados a través de políticas expansivas coherentes, consistentes y uniformes en el tiempo. Y por supuesto, comunicándolas de una manera correcta, en tiempo y forma, sin sobresaltos, sin sorpresas. Reformas que llevarán tiempo en dar fruto, pero que sin duda lo darán.
Me encanta el anuncio de nike de Nadal, Gasol e Iniesta. Nuestro país tiene una luz especial, que algunos dicen que ya no brilla. La gente de aquí es de otra pasta, no se rinde jamás. Y sin embargo nos estamos rindiendo. Estamos tirando balones fuera, echando la culpa a otros y no asumiendo nuestra parte alícuota, muy pequeña, pero que la hay. Y por supuesto, volviendo a ser los mejores tertulianos del mundo...pero la palabra no crea, crean lo hechos.
Estoy convencido que como en un enfermo, el estado de ánimo cuenta, y lo principal de este enfermo es que el estado de ánimo sea positivo. Debemos ser optimistas y trabajar, sin lloriqueos. Esto da seguridad a los mercados y muestra solidez ante las tormentas. No podemos ser un barco de papel que sople a donde nos conduce el estornudo de Francia o Alemania. Tenemos la obligación, la historia y las condiciones para estar en el puesto de mando junto a los grandes capitanes.
Yo creo, ¿y tú?
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