Quien no innova no gana...

Es la palabra de moda: innovación. Ahora todo el mundo se apunta al carro, todo el mundo quiere demostrar que es más friki que el resto, que tiene la última tecnología, que sabe de todo...

Partamos de una base. Innovar no es estar a la última en tecnología. Ni tener el iphone, android, etc más caro del mercado. Eso no es innovar.

Innovar es echarle un par de eso que estais pensando y hacer las cosas de otra manera. Es pensar de otra forma. Eso, por supuesto puede suponer un cambio tecnológico, o de un modelo de negocio, o de un proceso...o de dejar de hacer el camino de toda la vida para ir a trabajar e ir por otro que no conocemos pero que puede evitarnos el atasco.

Innovar, en definitiva, es arriesgarse a hacerlo distinto y si se fracasa en el intento saber que la cosa no acaba ahí y que habrá más oportunidades, además de la experiencia que te llevas.

Claro, algunos se atreven. Innovan, cambian cosas y se les ponen en la palestra. Se les critica, y en el fondo se les envidia, se les admira. El mundo avanza gracias a ellos. Si no, hoy seguiríamos en la edad de piedra.

Pero aún así, y aunque se nos llene la boca de innovación, cuando alguien plantea algo distinto, en este país y en otros tantos se le mira raro. En el mejor de los casos se espera a ver que tal le sale la jugada. Ser un "first mover" en España tiene un riesgo "especial" . Si sale bien dirán que es suerte, que es un enchufado o mil cosas para minimizar el éxito, si sale mal, dirán, ya lo sabía, a quién se le ocurre, en fin, nos sabemos la canción.

Pues desde mi punto de vista, el que innova, bien porque descubra la vacuna contra el sida, o porque cambia de ruta para ir a trabajar y evita el atasco, debe estar orgulloso y la sociedad debe entender que esa palabra no es sólo una palabra "fashion", es todo lo que implica y si sale mal hay que apoyar, no desahuciar a esa persona o empresa.

Está bien esto de las modas. Es como cuando Alonso ganó la primera vez en fórmula 1 y todo el mundo era experto. Incluso el que no había conducido nunca...pero es que desde la barrera que fácil es todo.

Especialmente curioso es cuando los Estados se apuntan a estas modas. Señores políticos que mandan, si quieren impulsar de verdad la I+D nosean remolones. No se trata de incrementar un 0,5% una partida presupuestaria o darsubvenciones, se trata de orientar un país hacia esto. Desde las políticas educativas, las leyes de transparencia, la forma de gobernar, el impulso industrial, sin subvenciones, con premios por resultados. Es decir, se trata de creérselo, se sea gallego, andaluz, madrileño, murciano, catalán, etc... No es una moda. Es o apuesto o no. Así de simple

Yo agradezco a todas aquellas personas y empresas que toman riesgos y que se la juegan de verdad. Muchas vecesnoestoyde acuerdocon ellos, pero es que sin ellos, y sin sus muchos errores el mundo no habría avanzado. Gracias a Telefónica por inventar Wayra y a otros tantos por hacer lo propio. Lo que se hace con la más firme convicción no sale mal nunca, bien porque sea un éxito o un fracaso que nos enseña.

Si alguno tiene ideas, formas nuevas de hacer cosas, no os durmais. ¡Atreveros! Aunque salga mal. A veces para salir bien una tienen que salir mal quinientas.

Ese tan admirado Einstein...¡¡que se lo digan a él!!

Comentarios

  1. Tal vez parte de lo más complicado, David, es que innovar supone muchas veces hacer conexiones entre disciplinas aparentemente dispares y lejanas entre sí. Lo cual implica necesidad de personas que lleven en su cabeza muchas ideas diferentes, procedentes de intereses dispersos y no necesariamente congruentes entre sí.

    ¿Te suena el caso de un tipo que amaba a la par la caligrafía y los ordenadores?

    :-)

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