Esta luz nunca se apagará

Así dice la canción de los Smiths. Y es cierto. Hay luces que no se apagarán nunca, siempre brillarán.

Todos somos iguales pero por algún motivo difícil de explicar, hay personas que nos iluminan, que su sola presencia llenan cualquier espacio. Son de una pasta distinta. Acaparan la atención y atraen las emociones de los demás. Seguramente porque se lo ganan con sus actos, con sus demostraciones de amor infinito. 

Son únicas e irremplazables.

Esta semana se fué una de esas personas. Alguien cercano y muy querido. Se fue tranquila y llena de paz, sabiendo que lo que había sembrado durante toda su vida lo recogía a la hora de irse. Todos quisieron estar ahí.

Cuando una es madre de todos, hermana de todos, tía de todos…tiene mucho más que un título nobiliario. Tiene la gratitud eterna de todos los que la quieren, tiene la seguridad que siempre estará en el corazón de los suyos, en primera línea de la parrilla.

Se fue a otra dimensión, pero estará siempre. Durante una temporada no nos vamos a ver físicamente y echaremos de menos esos golpes de genio y espontaneidad. Será complicado saber que no habrá consejos de abuela para que se me quite la tos o el dolor de cabeza. Trataré de imitar el “jarabe mágico” aunque dudo que pueda hacerlo igual. Pero en esos momentos siempre quedará el recurso de pensar… ¿qué haría ella? Y estoy seguro que recibiré la señal adecuada.

Será difícil sí, cuando haya un acontecimiento de los “Lupi” y falte ella. Pero no os engañéis, no faltará, se mosquearía muchísimo si pensáramos eso. Estará ahí, vigilando y dando alguna orden que otra y más de un sabio consejo…Lo sabéis.

La muerte es un estado más. Quizás tengamos que morir para entenderlo en toda su extensión. Si es así, retrasaré un poco el acabar de entenderlo. Pero estoy seguro que aunque no se explicar lo que pasa en el plano físico, sí soy capaz de entender lo que pasa en el plano emocional. 

Uno no muere, sólo lo hacen “los malos”, si es que los hay. “Los buenos” nunca se van. Quizás no podamos escuchar sus bromas ni degustar sus platos master cheff pero si los buscamos allí estarán. Tal vez sea un problema de saber escuchar.

A quien sabe escuchar con el corazón nunca se le van los seres queridos los sentirá siempre a su lado.

No estéis tristes. Se fue alguien capaz de reunir a más personas que una estrella del rock. Quizás porque era eso, una estrella, a la que le iba mucho la marcha. Y como buena rockera, nunca nos dejaría estar tristes, más aún después de todo lo compartido. Hoy debe ser día de fiesta, hoy precisamente, día de la Madre, la madre de toda esta familia está más presente que nunca.

Nunca dejaremos de acordarnos de ti, descuída que si alguno se desmadra ya estaré yo para decirle…”ummmmmmm” y esa mirada de teniente coronel fraternal pero disciplinado. 

No te preocupes, que hemos entendido el legado y ese legado, esa luz, nunca se apagará.

Descansa en paz mi amor, Yaya